¿Se terminó la cuarentena? ¿Pasó el bicho de la gripe? ¿Tenemos que seguir encerrados o podemos recuperar nuestra inútil libertad? ¿Estamos a tiempo de recuperar los viejos hábitos/vicios? ¿Se podrá volver a compartir un mate con la gente? ¿Volveremos a tener contacto con otros seres humanos? ¿Se podrá coger sin miedo a la neumonía? ¿Habrá sido esto un invento de las empresas farmacéuticas? ¿En la tele volverán a hablar de inseguridad todo el día? ¿Sobrevivimos a una epidemia o simplemente nos prestamos a un juego macabro? ¿Cómo estarán las cosas en la calle? ¿Habrán aprovechado los políticos para hacer de las suyas? ¿Qué hacemos con todo el alcohol en gel y los barbijos que compramos? ¿Hay que considerar todo esto como tiempo perdido o como ocio bueno para limpiar las fibras?La sensación de farsa es cada vez mayor, en el fondo la duda se está transformando en una bola de nieve. Sin embargo, es recomendable -o recomendamos junto al doctores del madariaga- seguirle la corriente a la paranoia colectiva y quedarse en casa a mirar una peli o leer ese libro que compramos hace rato y que todavía tiene el envoltorio de plástico. o recorrer los caminos interminables de la Internet. Por si las moscas, nada más, aunque... ¿realmente respetamos alguna de las indicaciones para evitar el contagio? Y por cierto, ¿hay algo para hacer este fin de semana?
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