El Hijo Bobo: Como ponerse un forro

viernes, 21 de agosto de 2009

Ahora hasta en los aviones te lo enseñan.

Hijo Bobo: Posadas, Misiones, Argentina; Podríamos empezar con el chiste fácil de que “El Hijo Bobo nació de la relación entre dos primos que en una reunión familiar…”, pero el tiempo y el espacio son escasos. El primer número de este proyecto salió en vísperas de navidad del año pasado (2006), sin formas de contacto, avisos o explicaciones. Vino al mundo así, urgente, desesperado por interpretar lo que veía (y lo atemorizaba), sin mucho tiempo para pensar en presentaciones. Ahora, bueno, que está empezando a hablar con más dicción y coherencia se detiene un ratito para ver qué impresiones, reacciones o vaya a saber qué generó con su primer paseo por estas calles. Así que, a partir de ahora quedan los oídos de este niño para comunicarse con quienes se sientan interesados. Queda abierto el mail del Grupo Editor (los tutores de El Hijo) para recibir sugerencias, críticas (menos las terroristas y extorsivas) y todo tipo de aportes. Popurrís con todo lo que pasa en el día a día: humor, cuestiones políticas, existenciales, culturales, la bizarridad urbana misionera y demás yerbas. Así, que están invitados a pasear en el changuito del Hijo, por este generoso mundo. PD: Atajense bien fuerte.

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