La verdad es que hace rato deberíamos haber puesto algo respecto del aumento del boleto del transporte urbano de pasajeros en la cuidad de Posaá. El mal llamado "servicio público de pasajeros", dio un salto cuantitativo de la noche a la mañana de $1 a $ 1,20 casi sin aviso previo. Pusieron unos cartelitos ilegibles uno o dos días antes del aumento -¡Que guachos!- Se puede decir que nos duermieron aprovechando las vacaciones. Y supongo que más de uno esperó que el reclamo popular sea como una embestida de Quebracho, con cortes de ruta, bombas molotov y colectivos incendiados. Con gente negándose a subir al colectivo y caminatas masivas como forma de protesta. Bueno, pues nada que ver. La única iniciativa fue un tímido recurso de amparo y una carpa -fea- que se instaló -y todavía está instalada- en la plaza 9 de julio, frente a "la rosadita" -...que fetiche el del enano...- para juntar firmas que apoyen el reclamo y frenen este aumento monopólico.
Todos sabemos que los concejales no viajan en bondi, y que Casimiro los tiene bien coimeados, pero que por lo menos disimulen mejor y no expongan tan libremente que quienes realmente nos "gobiernan" son las empresas y el capital privado.
Se habla de mejoras en el servicio pero lo único que vemos son un montón de colectivos amarillos que van y vienen de la estación de transferencia. Compraron 100 colectivos nuevos, reciben un subsidio de la nación (gasoil diferenciado) y otro de la provincia (para el pago de los sueldos), tienen el monopolio del transpote urbano en Posaá y varias líneas en Buenos Aires, y sin embargo nos quieren vender que no le cierran los números ¡Déjense de joder! Lo que están haciendo es lucrar terriblemente con el sudor de los pobres diablos que dependemos del puto colectivo. Encima se quedan con los 5 centavos de cambio. Es como para romperle los vidrios a pedradas ¿O a alguien se le ocurre otra cosa?
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