El año pasado estábamos por hacer una nota sobre los diez años de la salida de Ok Computer. No lo hicimos, pero los ¡hijos de puta lo volvieron a hacer! Volvieron a sorprender a todo el mundo de la música con la salida del primer disco lanzado exclusivamente on line. In Rainbows fue el primer estreno discográfico por el cual el público pudo ponerle el precio que deseara a la obra. La subida de este álbum doble fue incluso más efectiva que la mercadotecnia de las empresas discográficas. La recaudación señaló que la audacia sigue siendo una buena inversión. A pesar de que al final de cuentas In Rainbows tuvo su versión “tradicional” editada en plástico y en vinilo respectivamente, el hecho había sido consumado. Todos salieron a debatir sobre el futuro de la música como la conocemos. Lo mismos que había ocurrido hace diez años (época de salida de Ok Computer) con la polémica entre Napster, Metallica, Madonna y los inicios de la popularización del download. Ahora el debate gira en torno a la posibilidad de que el artista (al menos los ya reconocidos) prescinda de los tentáculos de los grandes sellos para la distribución de sus creaciones. Pero como los mismos Radiohead señalaron, la estrategia de distribución terminó eclipsando al disco. Los comentarios fueron casi todos sobre la política implantada por la banda y algunos pocos sobre el contenido de su nueva producción. In Rainbows es una especie de continuidad y ruptura (al mismo tiempo) de su etapa de investigación con Kid A (2000) y Amnesiac (2001), pero retomando su regreso a las melodías “más humanas” con Hail to the thief (2003).En el artículo inicial que planeábamos sobre la década de Ok Computer queríamos hablar de la grata sorpresa que generó el tributo en clave reggae a esa colección de postales desesperantes del hombre postmoderno los Easy Star All Star (los mismos de la reversión jamaiquina de Dark Side of the moon) sacaron en el 2006 “Radiodread” y lograron una especie de pre-fiesta de aniversario. También estaba en mente la versión milonguera de Karma Police por Palo Pandolfo Antojo y el homenaje sinfónico de Ed O’ Brian con Hold me to This, ejecutando Radiohead como música clásica. Todas estas claves eran recogidas para demostrar la relevancia de estos cuatro ingleses en la música contemporánea. Pero, bueno, con lo que hicieron a fines del 2007 parece ser que no hacen falta más pruebas.
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